Jorge Suárez-Vélez / Tiranía o dictadura Jorge Suárez-Vélez (19 septiembre 2024)

 

Jorge Suárez-Vélez / Tiranía o dictadura

en EL NORTE

México no retrocedió 50 años en las últimas semanas, más bien entramos en terreno virgen saltando al abismo de la dictadura.

A quien crea que exagero, le pregunto cómo calificaría a donde la mayoría arrolla a la minoría apoderándose de 74 por ciento del Poder Legislativo con 54 por ciento del voto, aprovechando esa mayoría, aliado con el Ejecutivo, para demoler al Poder Judicial, que era frágil contrapeso.

A donde tras de arrollar en una elección, se roban las elecciones que perdieron (Alcaldía Cuauhtémoc, Jalisco); a un sistema que quita todo recurso legal para defenderse de arbitrariedades de un Estado capaz de armar carpetas ficticias, de extorsión fiscal y de amenazas a familiares para imponer su voluntad; que encarcela -o amenaza con encarcelar- a líderes de oposición a partir de cargos fabricados; que promueve la militarización, y tienta a los altos mandos con esquemas burdos de corrupción que los vuelven cómplices comprometidos; a un sistema que pacta con organizaciones criminales que promueven el voto a su favor, a cambio de impunidad y de mecanismos para tener jueces a modo. Se llama dictadura.

El México de hace 50 años no era democrático, pero en aquel PRI cabía cierta pulcritud, se cuidaban las formas. Morena procede con el tacto de un troglodita y la delicadeza de un rinoceronte; arrasa hasta con lo que no necesita arrasar.

En aquél había cierta meritocracia, estadistas lúcidos (Reyes Heroles), técnicos capaces (Ortiz Mena); se buscaba darles cabida a obreros, campesinos, organizaciones populares, empresarios, estudiantes, izquierdas y derechas.

AMLO ejecutó el manual populista, como lo define el historiador Yuval Harari, hundió las uñas en las grietas que ya existían para dividirnos, asumiéndose líder de un bando, con la promesa de eliminar al otro. Por eso no hay fotos del Presidente con la oposición. Un país dividido se estanca, en el mejor de los casos, particularmente cuando empresarios, técnicos y expertos quedan en el bando enemigo.

Citando nuevamente a Harari, el valor fundamental de la democracia está en sus mecanismos para corregir, mismos que nos acaban de quitar. Debe ser "como un tren que te lleva al poder, pero del cual te bajas al llegar".

AMLO vivirá en éste y decidirá a quién abrirle; desde Morena impondrá legisladores, jueces, funcionarios, y vigilará que Sheinbaum "no zigzaguee". Y el día que él no esté, estarán su hijo y los incondicionales -Batres, Fernández Noroña, Alcalde- que ya le impuso a su sucesora.

Experimentaremos un deterioro constante, gradual e irreversible. Sheinbaum hereda una economía endeudada (más de 50 por ciento del PIB), un déficit enorme (6.9 por ciento del PIB), un presupuesto abultado (RFSP de 5.4 por ciento del PIB) que se va a gasto corriente -programas sociales- y se dilapida en obras absurdas -Tren Maya, Dos Bocas- que requerirán de subsidios perennes.

Hereda una situación fiscal insostenible. Se les acabó el dinero. Ya no tendrá los cientos de miles de millones en "guardaditos". Pemex les adeuda 300 mil millones de pesos a proveedores, la obra del Tren Maya sufre retrasos por lo mismo, las Secretarías operan en "ambiente controlado" desde enero, cubriendo sólo nómina y sin lo más elemental -papelería, agua, café- incluso en los hospitales de especialidades, las joyas de la corona del sector salud, se han pospuesto cirugías desde agosto por la falta de materiales esenciales, pues hay un subejercicio en el presupuesto de salud, al igual que en el de educación.

Será difícil recaudar impuestos en un país estancado, sin recurso legal para los inversionistas, con crimen rampante, y ante la probabilidad creciente de que perdamos el Grado de Inversión y de que no se renueve el T-MEC que nos hizo el principal socio comercial de EU.

En este sexenio creció la recaudación a partir de la extorsión fiscal a grandes contribuyentes. Se intenta seguir ese camino con la "reforma fiscal" basada en la prisión preventiva oficiosa por defraudación fiscal.

Pronto se culpará a los empresarios por el estancamiento. Echarán mano de las Afores y después tratarán de utilizar las reservas de Banco de México como garantía para crédito.

Pinto un panorama negro, pero no descabellado a partir de lo reciente.

Para resistir, empecemos por llamar a las cosas por su nombre.

@jorgesuarezv