BENCHMARK / Los profes son el enemigo Jorge A. Meléndez Ruiz (10 junio 2025)

"Debemos atacar agresivamente a las universidades... los profesores son el enemigo".

Aunque no lo creas, son palabras de JD Vance, vicepresidente de Estados Unidos (ve su discurso en nuestros sitios).

Y vaya que Mr. Orange y compañía van con todo contra las universidades y la ciencia.

Imagina, más de 100 universidades que recibieron 33,000 millones de dólares de apoyo federal en los últimos dos años son investigadas. Si te pliegas, como Columbia, te quitan la guadaña. Pero sí te revelas como Harvard (¡bravo, de veras!) te quitan todo. De locos, ¡hasta estudiantes internacionales!

Por otro lado, Trump canceló apoyos por 3,000 millones de dólares para el National Institute of Health (NIH) y la National Science Foundation (NSF), afectando a miles de proyectos, incluyendo investigaciones sobre el cáncer y la mortalidad materna.

Ah, y el plan de Trump de presupuesto 2026 busca recortar 37% de los fondos para el NIH, unos 18,000 millones de dólares, a pesar de que tan sólo el año pasado sus proyectos generaron actividad económica por, vete de espaldas, ¡100,000 millones de dolaritos!

Terrible.

Es literalmente darse un tiro en el pie, pues el liderazgo global de Estados Unidos (EU) en temas educativos y científicos es precisamente una de sus grandes ventajas globales.

"En ningún ámbito el dominio global de EU es más absoluto que en la educación superior. Con 4% de la población mundial y el 25% del PIB, aquí radica 65% de las 25 mejores universidades del mundo", señala Fareed Zakaria.

El periodista de CNN desmenuza el ecosistema único que apuntala este liderazgo estadounidense.

Por un lado, el gobierno federal proporciona gran parte del financiamiento a través de instituciones como NIH y NSF, mientras que fundaciones y empresas aportan casi todo el resto.

Con estos recursos se realizan investigaciones que luego pueden derivar en grandes avances científicos.

Por ejemplo, en parte por los apoyos del gobierno, mapear el genoma humano costó menos de 3,000 millones de dólares y tardó sólo 13 años. "Un requisito clave fue que la investigación se pusiera a disposición del público 24 horas después de ser generada", comenta Zakaria.

Esta guerra de Trump es puramente ideológica, es una batalla entre valores conservadores e ideas liberales.

El problemita es que esta batalla ideológica puede llevarse de encuentro al progreso en momentos cuando EU más lo necesita. En momentos cuando nuestro vecino del norte pelea la supremacía de los siguientes 100 años con China (relee "¿Le ganará China a EU?").

Curiosamente, la receta del Sr. Naranja parece tomada del recetario fallido de su hoy gran enemigo.

"La furia de Trump contra el mundo académico se asemeja a los primeros días de la revolución cultural, cuando un Mao Zedong cada vez más paranoico destrozó las universidades chinas, una locura que tardó generaciones en remediar", agrega Zakaria.

China, por supuesto, aprovecha este craso error.

"El gobierno chino anunció hace poco en Pekín su intención de aumentar drásticamente su financiación para la investigación y la tecnología para liderar el mundo en ciencia en el siglo XXI", explica Zakaria.

Trump cava así la tumba de EU.

Por cierto, toda proporción guardada y por razones distintas, la 4T no canta mal las rancheras en eso de ver a la educación como enemigo.

Si en EU la atacan por razones ideológicas, aquí lo hacen por conveniencia política. Para ir "a la segura" con los pobres. Porque cuando se cancela el aspiracionismo como palanca de mejora, sólo quedan los apoyos. Queda que "el gobierno bueno" salga al rescate.

Por supuesto, las universidades tienen sus problemas. Quizá falta balance. Quizá falten voces conservadoras. Quizá falta más debate.

Más debate. Más discusión. Más investigación.

Más, no menos.

Ahogar a las universidades, a los profesores y a la ciencia es un acto suicida para el país más poderoso... y para el más pobre.

Y eso sí que no debería estar sujeto a debate.

EN POCAS PALABRAS...

"La ciencia de hoy es la tecnología de mañana".

Edward Teller, físico húngaro.

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